Comprar por internet es cómodo, pero también es una de las vías más utilizadas por los estafadores. Con unas comprobaciones muy simples puedes reducir el riesgo y asegurarte de que compras en un comercio legítimo.
En general, las compras online se autorizan desde la app de CaixaBank.
Antes de autorizar, recuerda revisar que el nombre del comercio y el importe sean correctos.
Desconfía de ofertas demasiado buenas.
Evita acceder desde SMS, emails o anuncios que no estabas esperando. Es preferible entrar escribiendo directamente la web oficial del comercio.
Comprueba que la dirección sea correcta, sin variaciones extrañas. Si el diseño es pobre, tiene fallos o no coincide con lo que esperas del comercio, desconfía.
Revisa las opiniones de otros usuarios en internet, presencia en redes y datos de contacto verificables. Un comercio legítimo muestra política de devoluciones, dirección física y formas de contacto claras.
Si apenas hay información o todo parece genérico, es mejor no seguir.
Evita utilizar wifis públicas para hacer compras online y recuerda usar un navegador y un sistema operativo actualizados con la última versión para reducir riesgos.
Los fraudes suelen disfrazarse de urgencias o amenazas. Desconfía especialmente de peticiones de datos o pagos urgentes.
Mantén la calma y aplica el sentido común, y si crees que puedes estar siendo víctima de un fraude, contacta inmediatamente con CaixaBank por los canales oficiales: Espacio Gestor o en el teléfono 938 87 25 25.
